El artista autodidacta Rob van de Lei nació en 1969 en un barco de navegación interior en los Países Bajos y se siente como en casa en todas partes. El descubrimiento es la esencia de su trabajo.

Crea mundos y entidades que nunca se han visto, pero que pueden existir en algún lugar de un mundo extraño, mientras una pincelada fluye hacia la siguiente, un mundo también fluye hacia el siguiente. A veces, una mancha se convierte en una forma figurativa, a veces sólo parcialmente, para que el espectador tenga la oportunidad de descubrir, soñar y ver cosas que quizás ni siquiera haya pintado. Le gustaría llevarle en un viaje de descubrimiento a otra dimensión, fuera del estrés de la vida cotidiana.

La técnica de reflexión que desarrolló durante la colaboración con Ashley Christudason de Singapur es ideal para ello. Al trabajar en un espejo en varias capas y utilizar varias técnicas, se crea una imagen que cambia continuamente dependiendo de la incidencia de la luz, el ángulo de visión e incluso la ropa del espectador.

De uno de sus 'viajes' trajo las esculturas de luz De_Lights, réplicas de seres de luz que encarnan la libertad. Estas esculturas de luz son como las criaturas originales y la libertad misma, frágiles y poderosas al mismo tiempo. En el futuro quiere que De_lights interactúe con el Levante y la luz de la Costa de la Luz, en el sur de España.

Van der Lei produce obras por encargo que son únicas y muy personales. Comienza con una chispa, una pequeña anécdota, un objeto, un hecho sutil, todo se va formando durante el proceso de creación en un todo en el que se siguen descubriendo y reconociendo.

A petición, imparte una lección de pintura privada de 14 días en el sur de España para personas que quieran crear su propia primera obra de arte y pasar de principiante a avanzado durante el proceso.